(Madrid, 11 de marzo de 2015).- La Confederación Empresarial Española de la Economía Social (CEPES) recuerda que las empresas de Economía Social favorecen la eficiencia en la gestión del gasto público y la calidad en la atención a las personas en situación de dependencia.
El consejero y responsable del Área de Dependencia de CEPES, Carlos De la Higuera, señaló en el V Congreso Internacional Dependencia y Calidad de Vida, que organiza la Fundación Edad&Vida, que "la Economía Social permite, con su gestión empresarial de los servicios de atención a las personas mayores, una reducción sustancial del gasto público en estas áreas, a la vez que una mejora del servicio".
"Además, las empresas de la Economía Social generan servicios que atienden a personas dependientes y aportan soluciones a necesidades no cubiertas en principio por el sector público ni por el privado de carácter mercantil", explicó De la Higuera.
CEPES recuerda que las empresas de Economía Social desempeñan un papel esencial de colaboración con las entidades públicas en ámbitos de la política educativa, de sanidad, de seguridad social y servicios sociales en general (como prestadoras de servicios). Además, la Economía Social facilita la prestación de una oferta de servicios sociales y sanitarios coordinados y continuados de soporte, flexibles y con capacidad de adaptación a las necesidades cambiantes de la ciudadanía.
En este sentido, De la Higuera subrayó que "las actividades desarrolladas por la Economía Social se materializan en una cartera de servicios que dan respuesta a las situaciones de dependencia en entornos con una problemática social cada vez más compleja y acentuada". "Además", añadió, "no persiguen únicamente atender a las personas que se encuentran en situación de dependencia, sino que contribuyen a subsanar la carga socio-familiar que el cuidado de una persona con este perfil requiere".
"Las cooperativas, sociedades laborales, mutualidades de previsión social, empresas de inserción, centros especiales empleo y entidades de la discapacidad (asociaciones y fundaciones) han sido y son gestores naturales de estos servicios por su origen, génesis y directa vinculación con los colectivos con especiales necesidades de apoyo", añadió el consejero y responsable del Área de Dependencia de CEPES.
Como ejemplo, De la Higuera ha señalado que "el modelo de concertación utilizado en la Educación pública se valora como un buen modelo de colaboración público-privada que debería ser utilizado en la configuración del Sistema para la Autonomía y Atención a la Dependencia (SAAD)".
De la Higuera participó en la mesa redonda "El punto de vista de una asociación de empresas de Economía Social". En ella, destacó que la especialización productiva de la Economía Social en estos servicios es altamente significativa, ya que sus empresas son un claro ejemplo de cómo la racionalidad económica y el progreso social son compatibles con criterios de solidaridad y responsabilidad social en la gestión empresarial.