A través de las siguientes líneas, como Presidente de la Confederación Empresarial Española de la Economía Social (CEPES), quiero manifestar el valor y la trascendencia, tanto en el plano social como en el económico, que esta otra forma de hacer empresa ha ido alcanzando durante los últimos años, respondiendo como ninguna otra forma empresarial a los retos y desafíos que no está planteando la realidad actual.
Las empresas de Economía Social son un activo para la sociedad. Proporcionan empleo estable y de calidad, mejoran las condiciones sociales en los momentos en los que hay empleo y soluciones en tiempos de crisis.
Un modelo de empresa cuyo valor reside en tres dimensiones: local, social y empresarial. Porque es un modelo de empresa fuertemente vinculado con su entorno, donde desarrolla su actividad principal. Porque prioriza el factor trabajo sobre el factor capital, mostrando un compromiso total con la responsabilidad social, contribuyendo a la generación de puestos de trabajo estables, integrando a los colectivos más desfavorecidos y generando desarrollo económico donde se encuentran. Y por último, porque tienen una clara dimensión empresarial y económica que garantiza no sólo la eficacia sino la eficiencia de sus proyectos.
Un modelo empresarial que está respondiendo a una necesidad de cambio que la sociedad está demandando a todas las instancias, a los poderes públicos, a las empresas, a las organizaciones y a las personas.
Unas empresas que en los últimos seis años han creado 190.000 empleos y 29.000 empresas y que se sienten legitimadas para que se reconozca a la Economía Social, como un modelo que se apoya en valores y principios, como un agente social con presencia en el diálogo institucional y en todos los foros donde se construyan políticas públicas que ayuden a mejorar esta sociedad.
Desde una perspectiva internacional y, más concretamente desde el ámbito europeo, la Economía Social Española se ha convertido en un referente. Su presencia en entidades como Social Economy Europe, donde CEPES ostenta su presidencia, en el Comité Económico y Social Europeo o en el Intergrupo de Economía Social del Parlamento Europeo, son un claro ejemplo de ello.
En el Mediterráneo, CEPES continúa liderando la Red Euromediterránea de Economía Social (ESMED), donde se integran catorce organizaciones de nueve países y que ha permitido que la Economía Social esté presente en la Cumbre Euro Mediterránea de Chipre y en la Cumbre de Cooperación Industrial Euro- Mediterránea.
Con todos estos hechos se deja constancia de que CEPES y la Economía Social Española están posicionándose cada vez más en el escenario socioeconómico, motivándonos en mayor grado para reivindicar un espacio en los lugares donde se construyen las políticas públicas, como he señalado anteriormente.
Día a día, demostramos que somos un ejemplo de que otro modelo económico es posible, donde la eficiencia empresarial se combina con los valores de la solidaridad, responsabilidad y cohesión social. Somos un ejemplo de que hay otra forma de generar riqueza, de compartirla y de responder a lo que la sociedad está demandando, y que además corrige desigualdades y desequilibrios sociales.
Estamos convencidos de que la Economía Social es una de las soluciones que el futuro demanda. No olvidemos.
Ahora, sin duda, es…. EL MOMENTO DE LA ECONOMÍA SOCIAL.
Juan Antonio Pedreño
Presidente de CEPES